Soy Nashira, madre de Maia y Milo y educadora perinatal especializada en hipnoparto. Cuando nació mi hija sentí que no se me hizo partícipe de mi propio parto, acabó siendo un evento medicalizado y frío. Tardé años en comprender y sanar toda la culpa y el dolor que eso me causó.
Embarazada de nuevo,supe que esta vez sería diferente. Mi pareja y yo nos preparamos todo lo que pudimos para vivir ese momento mágico con más plenitud y dignidad, para ser dueños de nuestra experiencia.
La manera como lo afrontamos hizo que pudiera recibir a Milo segura de mí misma, en calma y con mucha emoción por empezar esta maternidad.
Y me di cuenta de dos cosas: